viernes, 10 de julio de 2009

analgésicos


Toda relación humana es dolorosa. Cada una de ellas está cifrada por el dolor. No es posible eliminarlo, porque nunca desaparece. Toda presencia es responsabilidad, preocupación que aniquila. La única esperanza es la de abolirse, separarse del mundo y ser esa isla silenciosa que mueve los ojos y las orejas. No ser sino a la distancia de eso que circula entre la niebla. No ser sino como es una roca o una flor silvestre o el agua que no siente y se mueve. Nos hemos olvidado de que el sufrimiento es parte fundamental de nuestra existencia. Un olvido ingenuo posiblemente, aun cuando nuestra seguridad dependa de él. No solo se trata de que su presencia me permita medir aquello que llamo felicidad. No solo es un parámetro o una ficha que me indique cuándo comienza el miedo y cuando termina, cuando mi cuerpo se dispara en medio del placer o se acaba, hundido en el silencio.

¿Qué es el hombre sino un animal asustado?


Buscamos y hacemos siempre lo correcto; y lo correcto es siempre alejarse del dolor, evitarlo, esconderlo. Ser racional es flotar en un territorio indoloro e insípido al mismo tiempo. Es dejar que las cosas sucedan sin que nada nos pase.

¿Y el amor es también sufrimiento?


No lo sé.


Al final caemos en la trampa, conseguimos un amor de farmacia; como si fueran pastillas o medicamentos. Una suerte de antídoto para la vida. El amor no salva a nadie. No cura nada. Cubrirlo de interés para mí es una violencia contra su verdadera naturaleza. No es la esfera ética ni la comercial. Si no amas con desesperación no hay amor. Si no se te acaba el aire o si en tu cuerpo no se materializa un espasmo repentino, no hay amor. Si se trata de medidas pensemos en ese viajero escaso de conciencia guiado como se guía a un animal. Llevado hacia adelante o hacia atrás. Desconocido del mundo. La persona que amo camina al lado del mar y no puede verme,dice, yo solo sigo sus huellas en la arena y sigo esa distancia que se prolonga como un demonio azul por la tierra; algo me atrae y me lleva hacia allí.


No hay comentarios: